¿Cómo implementar la ventilación y refrigeración naturales en logística y almacenamiento? Los centros de almacenamiento logístico suelen tener áreas más altas y grandes, como plantas de procesamiento de alimentos, fábricas farmacéuticas, fábricas de medicina tradicional china, etc. Sin embargo, si llueve en un corto período de tiempo, la ventilación y refrigeración naturales son deficientes, y la temperatura ambiente es demasiado alta o húmeda, los productos almacenados se dañarán considerablemente. Además, un ambiente deficiente reduce considerablemente la iniciativa y la eficiencia laboral de los empleados. ¿Cómo solucionar este problema en logística y almacenamiento?
Existen muchos métodos de ventilación y refrigeración en almacenes logísticos, pero pocos son capaces de crear un ambiente cálido y con altas temperaturas. Muchos centros de almacenamiento instalan ventiladores centrífugos en el techo para mejorar la calidad del aire interior y la circulación de los productos mediante su efecto. Sin embargo, el efecto de refrigeración real de los ventiladores de flujo axial no es evidente y no puede cubrir todos los rincones. Se producirá humedad y olores en el interior que no se pueden eliminar.
Existen muchos métodos de ventilación y refrigeración en almacenes logísticos, pero pocos son capaces de generar un ambiente cálido y con altas temperaturas. Muchos centros logísticos y de almacenamiento instalan ventiladores centrífugos en sus techos para mejorar la calidad del aire interior y la circulación de mercancías. Sin embargo, el efecto de refrigeración de los ventiladores axiales generales no es evidente y no puede cubrir todos los rincones. Se producirá humedad y olores en el interior que no se pueden eliminar.
Entre las muchas soluciones, los ventiladores HVLS se encuentran entre los pocos dispositivos mecánicos que pueden mejorar razonablemente la ventilación natural de los almacenes logísticos. El diámetro de las aspas de los ventiladores de techo industriales supera los 7 metros. Al girar, el volumen de extracción cubre una amplia superficie, que puede abarcar unos 2000 metros cuadrados. Con un contacto tan amplio, se logra el flujo natural de gas, lo que ayuda al centro logístico y de almacenamiento a lograr la ventilación, eliminar los gases turbios y calientes del interior y reducir la temperatura del gas.